Has aprendido mucho. Demasiado, quizás.

Cursos, másters, certificaciones, herramientas nuevas, técnicas de última generación…

 

Y aún así, algo no encaja.

No lo dices en voz alta, pero lo sientes:

estás harto de seguir formándote para acabar siempre en el mismo punto.

 

Formación tras formación creyendo que «ahora sí con esto nuevo voy a resolverlo!»

pero cuando estás delante de tu paciente… sigue sin encajar.

 

Y formarse está muy bien! no me malinterpretes!

 

Pero si el fundamento sobre el que construiste todo tu conocimiento es erróneo,
da igual cuántas capas le pongas encima.

Estás construyendo sobre un castillo de naipes.
Antes o después, todo se cae.

Es hora de desaprender...

Sí, leíste bien: desaprender.

Cuestionar lo que juraste que era verdad.

Y no por rebeldía, sino por coherencia.

TIENES DOS OPCIONES:

Seguir construyendo tu metodología de trabajo sobre un castillo de naipes

que en cualquier momento puede desmoronarse por falta de una buena base…

 

O armarte de valor y cuestionarte los mismos principios de la vida y de la medicina

e ir más allá de lo que diste por verdadero sólo porque te lo repitieron mil y una veces…

Puedes pensar que soy un prepotente, arrogante o cosas peores. Y no me importa, la verdad.

No creo que yo tenga la verdad absoluta… de hecho estoy convencido de que tal cosa no existe

 

Pero sí tengo claro que la biología tiene leyes claras que marcan cómo funciona el cuerpo humano

Y esas leyes son inquebrantables… hasta que se demuestre lo contrario.

 

Spoiler… nunca se ha demostrado lo contrario

 

Y cuando te das cuenta de que toda la base de la medicina es no sólo distinta a estas leyes

si no, totalmente opuesta… no te queda otra que tomar LA DECISIÓN.

 

Porque en biología no hay algo bueno y algo malo…

 

** No existen bacterias negativas o positivas

** La inflamación no es un error, ni algo negativo

** El sistema inmune no es tal cual te lo contaron

** Los virus… tampoco son lo que crees

** Ni si quiera un proceso oncológico es algo azaroso

 

Podemos seguir…

 

** El colesterol no produce infartos

** La autoinmunidad es sólo un error de interpretación

** El Helicobacter pylori no es el enemigo, cumple funciones de homeostasis gástrica

** La teoría del contagio no tiene base científica alguna

** La resistencia a la insulina es sólo una adaptación del organismo

** Las bacterias viajan a través de la sangre y el sistema linfático, sin producirte síntomas infecciosos

** De hecho varias de ellas viajan dentro de macrófagos y fagocitos, usándolos de vehículos

** Incluso esas bacterias llamadas «negativas» trabajan en sinergia con las células con funciones inmunitarias

** Y tu cerebro está lleno de ellas… aunque se creía que era un medio aséptico

Sólo una de estas frases que te pueda demostrar, tira abajo el castillo de naipes del paradigma actual.

¿Y si pudiera demostrarte cada una de estas afirmaciones de forma científica?

Incluso utilizando los mismos estudios científicos

que son usados para demostrar supuestamente lo contrario.

Date la posibilidad...

Dame tan sólo unos mails para que veas que lo que digo tiene base

Y hagamos un trato…

Si te demuestro al menos una de todas estas frases – todas son demostrables aunque todavía no las creas –

prométeme que tomarás responsabilidad

y desecharás lo que ya no te sirva.

 

Por muchos años que lo hayas estudiado, eso no significa que sea cierto.

 

Y puede ser doloroso, e incluso frustante

Lo sé, yo también lo viví…

 

Pero te aseguro que es enormemente liberador cuando encuentras sentido a lo que haces

y cuando consigues leer la lógica con la que opera la vida.

 

TOMAR LA DECISIÓN ES TENER EL VALOR DE DESMONTARTE POR DENTRO

y ser capaz de no aferrarse, de soltar aquello que ahora crees que es lo verdadero

para dar paso a un nuevo criterio que te hará realmente libre.

Si has llegado hasta aquí y notas eso en tu interior...

es el momento de dar el paso

Pon tu email a continuación y entra en la primera newsletter enfocada en desaprender

Una newsletter para profesionales de salud incorformistas, críticos

y con verdadera vocación por ayudar y acompañar a sus pacientes

Si te gusta la ciencia, pero la de verdad, no la comprada

Si quieres aprender a leer textos científicos con pensamiento crítico

Si quieres salir de la hipnosis colectiva y acabar con el ilusionismo

Si quieres diferenciarte y conectar con la coherencia biológica

Es tu oportunidad. ¿La vas a tomar?

¿Qué vas a recibir?

Recibirás cada día un argumento, estudio científico, caso clínico o reflexión de valor

que te hará replantearte las bases del paradigma actual de salud.

Y te aportaré las herramientas, consejos y abordajes que mejor me han funcionado a mi

en los más de 12 años de experiencia clínica bajo el nuevo paradigma de Salud Biológica.

Y para qué me sirve esto, Roberto?

 

** Para entender de una vez por todas la causa original de cualquier patología

** Para quitar un montón de paja y encontrar las verdaderas agujas que te sirven para tejer una nueva realidad

** Para darte cuenta del error clave de «ser terapeuta»

** Para aceptar de una vez que el dogma científico-sanitario actual es sólo eso, un dogma

** Para realmente ayudar a la biología de la persona, y dejar de ir en su contra

** Para borrar de un plumazo muchas frustraciones que no son tuyas, son del sistema «anti-todo»

** Para comprender de forma científica, certera y manifiesta que un síntoma es un mensaje biológico

** Para descubrir la piedra clave sobre la que pivota el sistema actual: el miedo. Y eliminarlo de raíz

** Para ser libre, vivir en conexión plena y ser el ejemplo que tus pacientes quieran seguir.

** Y sobre todo… para que vivas en paz con tu vocación y disfrutes del lenguaje de la vida.

Y quién eres tú, Roberto, para enseñar esto?

Aquí es donde debería contarte mi amplia experiencia trabajando y formando a numerosos profesionales de salud desde hace más de 12 años: médicos de todas las especialidades, nutricionistas, PNIE, enfermer@s, psicólogos, fisios… y más.

 

Pero no lo voy a hacer.

 

Ya me irás conociendo mejor a través de mis correos. Prefiero que los argumentos hablen por mí.

Y si en algún momento crees que «no se», «no estoy suficientemente preparado», «no aporto algo a lo que ya conoces»…

Entonces, simplemente, puedes darte de baja en cualquier momento.

 

Es sólo una decisión… pero no cualquiera. Es…

LA GRAN DECISIÓN

¿Te apuntas?

«Conoceréis la verdad, y la Verdad os hará libres…»

Hay otra vía de abordaje con plena coherencia biológica.

Si estás list@, comenzamos.

¡Salud y Evolución!

 Roberto Gorostiaga